En la sede principal de Acción Democrática (AD) en Lara, mejor conocida como “La Pochocha”, delegados regionales y representantes municipales y parroquiales del partido celebraron asamblea para debatir próximas acciones que permitan “aceitar y afinar la estructura” interna de la tolda, a fin de apoyar y movilizar, en lo próximo, a los ciudadanos que deban validar sus firmas del 20 al 24 de junio, con motivo de la solicitud de Referéndum Revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro.
Tal aseveración fue realizada por el diputado al Consejo Legislativo de Lara (CLEL) y secretario regional de AD, Roberto Sánchez, quien manifestó que tanto firmantes aceptados como excluidos deben participar en este proceso, unos para validar y otros como “factor de arrastre” para llevar a quienes sí puede “refirmar”.
-Chequeamos cada una de las secretarias y municipios, revisando que nos falte nada, porque lo que viene es un gran reto en Venezuela, no sólo por la solicitud del referéndum, sino porque los próximos meses serán muy difíciles para la población en terminos de desabastecimiento.
Subrayó que el 80% de la población rechaza la gestión del actual gobierno.
Sobre la complejidad del traslado de quienes desde los municipios foráneos deban validar sus firmas en Barquisimeto, Sánchez manifestó que actualmente trabajan en el diseño de un inventario de firmas, a fin de plantear estrategias para la validación de las mismas.
Aunque señaló que en el caso de Lara, la mayoría de las firmas estarían nucleadas en las parroquias Santa Rosa, Catedral y Concepción, reconoció que debe haber un trabajo especial en los municipios foráneos.
-Pensamos que se iban a habilitar puntos en los municipios foráneos, pero ya está claro que el CNE se ha dedicado a sabotear el referéndum revocatorio.
Sánchez manifestó que se trata de “una operación morrocoy”, así mismo cuestionó que la sede regional del CNE sea espacio suficiente para logísticamente operar los más de 60 dispositivos biométricos, a fin de atender las más de 65 mil firmas aprobadas.
Cuestionó que la atención para la validación sea en horario de oficina y que pueda coincidir con el horario laboral de los firmantes.
Exhortó a los empresarios a otorgar los permisos correspondientes a sus trabajadores y al CNE a pronunciarse sobre la necesidad de ausencia de sus labores de los firmantes dependientes de instituciones públicas.
Sánchez precisó que en los próximos días realizarán múltiples planteamientos e interrogantes al CNE. Entre estas si cerrarán las puertas de las oficinas regionales el último día de plazo, aún habiendo personas en cola para la validación de sus firmas.
El tema eléctrico también será punto a verificar, expresó.